Todo es una transformación, lenta, fluida, en mayor o menor medida, e incluso, grande, y hermosa sintiéndola así cuándo una vez lo estás viviendo, te das cuenta de lo que te supone, percibiendo un placer exquisito y sutil, serena, fluida, y lo mejor de todo, te gusta. Y entonces, te das cuenta del cambio, del trayecto, del momento, y de que has llegado a un fin, al fin de un estadio, aventurando a seguir en un gran, buen comienzo. Y lo mejor de todo lo bien que te sientes, la belleza que se expande ante este momento. Qué paz, qué serenidad, qué estadio de reconocimiento. Y bueno. Me gustaría que todos lo pudieran sentir, vivir, y acceder a él, por lo que ofrece, y hace emanar desde lo más profundo de uno, apacible, revitalizando, expandiendo desde el corazón, y por lo tanto sublime. Es una esencia, una comunicación con el todo, relaciona, y expande hacia él. ¿Y con qué función?. Positiva, grata, beneficiosa. Seguro. Es, un gran estado. Por eso me gustaría que tod
Entra en un mundo real. La otra realidad.