BAJAR LAS LLAMAS.
¡Hay de quien se digna de prender una mecha!
En silencio y escondido no lo dice, porque sabe muy bien lo que realiza.
Nefasto y lleno de ganas, inconsciencia de alguno.
Perjudica al mundo.
Asesino de la vida, poco a poco la hace mediocre, la merma.
Árboles que se asustan e intentan el sustento, salvarse a toda costa.
La llama una vez encendida crece y quema,
Se reparte por todo el entorno.
El medio avisa desde lo lejos lo que pasa,
No reaccionan, saben y en su humildad dejan.
Los que pueden huir lo hacen. Los que no esperan.
Necesitan un buen guía que los dirija.
Lo hecho, hecho esta y acatan el hecho.
A la orden del humano.
Humanos que aman, que respetan y saben de las leyes de la vida,
Las que permiten la existencia, ciertas, honestas, y en caso extremo.
No es un juego y por ello, seriedad y responsabilidad la gran base,
no se dona a Todos.
Evolucionados en grados y ¿quién sabe?
Solo Dios, El Creador, La Esencia de la vida, Energía extrema.
Incendios provocados que queman existencia…grande.
Árboles, arbustos, vegetación, reino animal… ¡Cuánto!
Nuestro bienestar propio. No saber, en el fondo, es lo que existe.
Ignorancia.
Ahora, una gran era.
Muchos lo toman quizás a broma…y ¿Quién sabe?
La incredulidad y la ignorancia el gran problema. Otra vez…Ig…
La gran tónica.
Una era en la que se abren nuevos canales,
Canales sabios y especiales,
Que lo único que buscan es la sabiduría en amplitud,
Buscando supervivencia…
¿De quienes?
Aquí nadie responde, nadie lo sabe.
Solo los que trabajan por evitar la muerte extensa, protección del Todo,
lo máximo, empiezan a ver su cometido.
Todos tenemos uno,
Y al tanto, no es la destrucción, no.
Equivocados.
Protección de vida.
Mi reino Natural guiar con vuestra esencia a las llamas rojas,
hermosas, decrecer, os determinan. El Todo.
Llamas encendidas por el hombre, bajar altura,
No es vuestro momento, ni cometido,
Agua y humedad caer sobre ellas apaciguando su calentura.
Vientos silenciosos guiar al lugar para su merma,
mermad el fuego.
Y así un nuevo estadio, desahucio contenido y crecimiento nuevo,
amaros y en ello ayudaros,
Es la esencia, esa que nos protege,
Que esta a nuestra orden y siempre supervisada por el Divino Creador y su ley,
Determina con la última palabra y el último acto.
Una nueva era.
En la cual la supervivencia se desata.
El gran fin.
Trabajadores en ello,
guiados…
Y uno bajar las llamas…
Montse Cobas.
Comentarios
Besos
Besos